Ahora que ya has leido el manual de tu cámara varias veces y sabes donde está cada botón y cada función de tu cámara ya estás listo para salir a hacer fotos, ¿seguro?.
Tengo una pregunta, ¿quieres hacer fotos? o en cambio ¿quieres poder reflejar aquello que ves a través de tus ojos?, aunque parece lo mismo, no lo es. En la primera opción te podrán servir los modos automáticos de tu cámara, en cambio existe un mundo más allá de estos modos, donde obtienes la imagen de lo que estás viendo y a la vez reflejar lo que estabas sintiendo en ese momento, en el que tú creas la imagen y no la cámara, en el que tú controlas lo que quieres que se muestre.
Esto lo puedes conseguir con el modo manual y los modos semiautomáticos de la cámara, SI, esos que en el manual te hablaban de todo eso de apertura, velocidad, profundidad de campo y estelas. Pero para poder llegar a eso tendremos que conocer todo lo que afecta a la toma de la foto.
Realmente cuando tomas una foto estas captando la luz que hay en ese momento y que hace que lo que tienes delante del objetivo quede grabado en el sensor. Si consigues conocer bien los parámetros que afectan a esta toma, podrás controlar la luz que capta tu sensor y podrás mostrar la imagen tal cual la ves tú o tal cual la sientes.
Para poder tomar una fotografía tenemos tres variables que debemos conocer, estas son: apertura del diafragma, velocidad del obturador e ISO. Estas tres variables las puedes controlar en los modos semiautomáticos de tu cámara, bueno, realmente como habrás visto en el manual de la cámara esos modos afectan realmente a dos de esas variables, así que empezaremos hablando de la tercera, la que no se controla con esos modos, el ISO
El ISO es la sensibilidad a la luz que tenían los antiguos carretes, cuando más sensibles eran (mayor ISO) podíamos tomar fotografías con peores condiciones de luz, cuando hacíamos fotos con carrete el ISO venía marcado en el carrete, y teníamos que tener claro desde el principio qué tipo de fotos íbamos a tomar para poder coger un carrete acorde a la cantidad de luz que nos íbamos a encontrar. Actualmente el ISO lo podemos cambiar cada vez que queremos para conseguir una mayor sensibilidad de nuestro sensor y así poder manejar más fácilmente los otros dos parámetros, que a la postre son los que realmente más utilizaremos.
Otra de las variables y que esta vez si que vamos a modificar es la apertura del diafragma, de manera resumida diremos que el diafragma son unas palas que se encuentran en el objetivo y su función es dejar entrar más o menos luz al interior de la cámara, cuanto mayor sea la apertura de estas palas (mayor apertura de diafragma) más luz entrará, también decimos que a mayor apertura de diafragma tenemos mayor profundidad de campo (pero esto es un asunto que veremos más adelante).
La tercera variable que nos encontramos es la velocidad del obturador, el obturador es la cortinilla que se encuentra delante del sensor y que impide que llegue la luz hasta él mientras componemos. En las cámaras réflex delante del sensor podemos ver un espejo que es el que traslada la imagen hasta el visor que es por donde nosotros componemos la escena, cuando pulsamos el disparador dejamos de ver la escena, esto es porque ese espejo se levanta y deja al descubierto el sensor para que quede “impresa” la imagen, ese tiempo que ese espejo está levantado (que suele ser muy poco) es lo que se llama velocidad de obturación. Esta velocidad nos indica cuanto tiempo va a estar expuesto el sensor a la luz. Si tenemos poca luz el sensor necesitará estar más tiempo expuesto, en cambio si tenemos mucha luz necesitaremos muy poco.
Como hemos dicho la combinación de estos tres parámetros nos darán una fotografía bien expuesta, y el conocimiento del manejo de estos parámetros nos permitirá conseguir los efectos que nosotros queremos. Hay que tener en cuenta que no solo hay una combinación de esos tres parámetros, como hemos visto hace un momento los tres parámetros afectan a la luz que incide sobre el sensor, si normalmente la ISO es un parámetro que fijaremos y será la mayoría de las veces constante, entonces solo nos quedarán dos factores, la apertura y la velocidad del obturador.
Ahora que ya tenemos claro esto, te pido que pienses en un grifo de agua. La apertura del diafragma es el diametro del caño de agua, y la velocidad del obturador será será el tiempo que tenemos que dejar corriendo el agua. Para llenar el mismo vaso de agua (exponer correctamente nuestra foto) tenemos varias opciones, si el diametro del grifo es pequeño (apertura de diafragma pequeña) necesitaremos más tiempo para llenar el vaso de agua (más tiempo de exposición); en cambio si el caño del grifo es muy grande (apertura del diafragma grande) necesitaremos menos tiempo para que se llene el vaso (menor tiempo de exposición).
Ahora ya sabes lo que es necesario para tomar una foto de manera correcta, pasemos a tu cámara.
En la cámara te habrás encontrado un montón de dibujos sobre la rueda de modos.
Los modos que no están marcados en esta imagen son modos totalmente automáticos y no nos vamos a centrar en ellos (no es el objetivo de este blog), nos centraremos en los modos semiautomáticos que son los que se encuentran dentro del rectángulo.
MODO P
La cámara calcula automáticamente una combinación de apertura y velocidad que nos dará una foto correctamente expuesta, pero nosotros podremos (mediante la rueda) variar esta combinación, elegir ninguno de los dos parámetros, siempre tendremos una combinación adecuada.
MODO S o Tv
Modo de prioridad a la velocidad, en este modo lo que modificaremos será la velocidad de apertura, nos permitirá tomar fotos de objetos en movimiento de una manera rápida, ya que nosotros seleccionaremos la velocidad de apertura deseada, dependiendo de si queremos congelar el sujeto o no, y la cámara ya realizará el calculo para poner una apertura acorde a lo necesario para que la toma esté correctamente expuesta.
MODO A o Av
Modo de prioridad a la apertura, aquí seleccionaremos la apertura del diafragma, para elegir una profundidad de campo grande o pequeña (un fondo nítido o borroso). La cámara calculará la velocidad de obturación necesaria para que la toma esté correctamente expuesta.
MODO M (MANUAL)
Modo manual que nos permitirá cualquier combinación que nosotros queramos, aquí ya está en nuestra mano exponer correctamente o ser creativos. Este modo lo veremos más adelante y es en el que más nos centraremos.
Ahora que hemos visto los parámetros que afecta a una fotografía, que hemos echado un vistazo sobre los modos semiautomáticos, llega la hora de que te pongas a hacer pruebas. Sal a la calle con tu cámara, y prueba los primeros tres modos que hemos visto aquí, prueba el modo de prioridad a la velocidad fotografiando coches, intentado seguirlos, o intentando dejarlos borrosos; consigue un modelo, tu hijo, tu pareja, un sobrino, ese muñequito que tienes por casa y ponlo delante de tu objetivo, y prueba el modo de prioridad a la apertura, intenta que todo lo que ves salga nítido, y luego que el fondo salga borroso.