Sesión de 7 horas con Maria

En el post anterior ya te hablé de un grupo de WhatsApp en el que había entrado y donde nos juntábamos fotógrafos y modelos, la verdad es que en este grupo nos encontramos también con estilistas, peluqueras, maquilladoras, etc.

Este grupo me ha ayudado a que me vuelva a animar a tomar fotos. Un día apareció un mensaje de una estilista con una idea de fotografías, buscaba un fotógrafo y una modelo para hacer algo específico de peinado y maquillaje. Y no tardé en contestar, me gustaba el ejemplo que había mostrado. En pocas horas ya estábamos, modelo, estilista y fotógrafo de acuerdo en hacer una sesión con ese estilo. Gracias a un buen amigo trabajamos en un estudio estupendo, en el que ya había trabajado varias veces

Concretamos la fecha para antes de terminar el año, la hora, y empezamos a hablar de planteamientos, además de lo que necesitaba la maquilladora trabajamos varias ideas más, algo que buscaba yo y algo que buscaba la modelo.

Cuando llegó el día preparé las cosas y me presenté en el estudio un rato antes de la hora que marcamos, hay que tener en cuenta que tenía que ir preparando lo que quería hacer. Poco después llegó la modelo Maria Roca, y poco después nuestra estilista, quien tuvo la gran idea de juntarnos, Loli Palmero.

Tras una hora de mucho trabajo de Loli, y es que Maria tiene una gran melena que Loli consiguió dominar, empezamos a disparar.

Como siempre los primeros disparos son para probar, para conocernos, y sobre todo nosotros tres que no nos conocíamos de nada.

En muy poco tiempo nos dimos cuenta los tres que esto empezaba a fluir, cada vez las poses iban más rápido, estábamos más a gusto y las risas iban a más. Tras un pequeño retoque de Loli seguimos disparando. También se nos unió un espontáneo que iba dando vueltas por el estudio

Y empezamos a jugar con luces de colores

Cuando conseguimos lo que necesitaba Loli, empezamos con el resto de ideas que llevábamos en la cabeza.

También nos adelantamos un poco a la Navidad

Las horas pasaban sin que nos diéramos cuenta, ni cansancio ni hambre, todo eran risas y ideas que iban surgiendo.

Después de 7 horas disparando nos dimos cuenta de la hora que era y dimos por finalizada la sesión. 7 horas de risas, diversión, buen rollo y sobre todo fotos.

Solo puedo dar las gracias a las dos por el día que pasamos y las fotos que conseguimos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *